El Gobierno vendería el Tango 04 comprado por Cristina debido a su alto costo operativo

La flota presidencial recuperará una de sus piezas más antiguas: el Tango 04, un avión adquirido durante la presidencia de Cristina Kirchner, está terminando una inspección de rutina en los talleres de Aerolíneas Argentinas. Antes de fin de año, volverá a estar disponible para trasladar amplias comitivas. Sin embargo, según pudo saber Infobae de fuentes oficiales, los expertos que conducen la flota oficial tiene un plan para venderlo. Aunque puede trasladar casi 70 pasajeros, es un avión antiguo, con un alto costo operativo y desactualizado desde el punto de vista tecnológico.

El Tango 04 es un Boeing 737/500 fabricado en 1992. Durante los primeros años de la presidencia de Mauricio Macri, estuvo guardado en la base aérea de El Palomar y hasta se especuló con venderlo. Recién en 2017 volvió a estar operativo.

Desde que asumió Alberto Fernández nunca se utilizó porque tenía pendiente una inspección de rutina. En plena pandemia, el T-04 ingresó a los talleres de Aerolíneas Argentinas en Ezeiza. “Por contrato debería estar disponible para mediados de diciembre”, confirmaron en el área de Logística de la Presidencia. Aunque no hay cifras oficiales, la inspección costará alrededor de USD 500 mil.

Actualmente, la flota presidencial solo cuenta con el Tango 11, un Lear Jet adquirido por la Fuerza Aérea que tiene capacidad para ocho pasajeros. El Gobierno ya tomó la decisión de arreglar el Tango 01, pero ese plan, tal como reveló este medio, demoraría al menos seis meses. Para eso hay que desembolsar entre 12 y 15 millones de dólares, una cifra que despierta muchas polémicas en plena crisis económica.

En un mes, se podría sumar el Tango 04. Expertos consultados por Infobae, dentro y fuera del Gobierno, coinciden que esa aeronave debería venderse cuanto antes. “Es un modelo viejo y no tiene escalera propia, eso le impide aterrizar en cualquier aeropuerto. Además tiene un costo operativo de 6000 dólares la hora, un valor altísimo para el mercado actual”, resumió un experto.

El único dato a favor es su capacidad. Con 67 plazas, casi duplica al Tango 01, que puede trasladar hasta 37 pasajeros. La estructura interna del avión se modificó levemente en 2014, cuando el Estado se lo compró a Aerolíneas Argentinas: tiene unas 50 butacas en la clase económica y apenas ocho en el “área presidencial”, una suerte de business con otras prestaciones. Además hay un sector con sillones para reuniones más privadas.

Si prospera la idea de Alberto Fernández de llevar al gabinete “federal” al interior del país, el Tango 04 permitiría trasladar al gabinete completo y a varios asesores. La iniciativa fue votada esta semana en la Cámara de Diputados y propone trasladar las reuniones de gabinete a 24 ciudades del interior. “Argentina debe comenzar a funcionar como un país federal y descentralizarse para que el poder esté también en el interior”, dijo el Presidente luego de la aprobación. Actualmente, un viaje simular obligaría a alquilar aviones privados para completar las ocho plazas del Tango 11.

Pese a su capacidad de traslado, los expertos proponen vender el Tango 04 y recaudar entre 3 y 4 millones de dólares. Ese dinero se utilizaría para adquirir un avión ejecutivo de hasta 15 plazas, con autonomía de vuelo y menor costo operativo. Las variantes que se evalúan arrancan en 7 millones y pueden llegar hasta 20 millones de dólares.

“Si necesitamos trasladar comitivas amplias dentro del país vamos a tener el Tango 01. El T-04 no deja de ser un avión de pasajeros antiguo. Si queremos ser la mejor compañía de vuelos del país con prestaciones para el Estado, habría que venderlo”, advirtió un experto.

El T-04 tiene un sector para reuniones.
El T-04 tiene un sector para reuniones.
El plan, todavía en pleno debate interno, tiene otro inconveniente: hay que destrabar las relaciones con la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), un organismo que depende de Naciones Unidas y suele utilizarse para las licitaciones internacionales. Ese vínculo quedó dañado por una demanda judicial de la firma “Kestrel Aviation Management” contra la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) por un supuesto incumplimiento de un contrato.

Sin la participación de la OACI, tampoco se puede activar el plan para arreglar el Tango 01. Esas reparaciones incluyen la “rectificación” de los motores, la pintura exterior, reparar el tren de aterrizaje, la actualización de la unidad de adquisición de datos de vuelo (DFDAU) y hasta agregar tanques suplementarios de combustible para poder volar hasta el sur de Europa o Estados Unidos sin realizar escalas, una de las grandes críticas al avión presidencial.

Dentro del T-01 también se proyectan cambios menores. “Hay que sacar algunas pantallas viejas, retapizar los asientos, y vamos a eliminar una puerta que comunica el despacho con la habitación presidencial”, detalló una fuente de la Dirección General de Logística, a cargo de Leonardo Barone.