Por Walter Anestiades
“A veces el silencio es la peor mentira”, dijo don Miguel de Unamuno. Los diputados nacionales Oscar Herrera Ahuad, Alberto Arrúa, Yamila Ruiz y Daniel Vancsik votaron contra el financiamiento universitario y la emergencia en pediatría. Y, de pronto, la gente “sensible” de Misiones que no ahorró adjetivos para criticar al gobierno nacional por impulsar proyectos como esos, ante el voto del cuarteto rovirista hizo silencio, bajó la cabeza y dio vuelta la página.
A veces la explicación de la conducta suele ser peor que la conducta. En un comunicado, a través de su cuenta oficial en la red social “X”, los legisladores renovadores expresaron que: “El Frente Renovador Neo acompañó el Presupuesto Nacional, pero expresó su disidencia en defensa de las universidades públicas y las personas con discapacidad”. Es que en el dictamen de comisión ellos votaron en contra de derogar la emergencia en discapacidad y el financiamiento universitario. Pero en la sesión votaron a favor del Capitulo XI de la ley de Presupuesto 2026 que derogaba esas leyes. ¿Entendes? Dicen que expresaron su disidencia porque en comisión dijeron “no” y soslayan que en la sesión, donde finalmente un proyecto se aprueba o se desaprueba, dijeron “sí”. Decirte eso y tomarte por estúpido es exactamente lo mismo.
La abrumadora cantidad de medios de comunicación que son pauta-dependientes del estado rovirista también se esmeraron en resaltar el voto en disidencia en comisión y en ocultar hasta lo periodísticamente patético el voto de apoyo en la sesión. Desde la universidad pública misionera, donde le hicieron el coro a la canción titulada “Oscar Herrera Ahuad defensor de la universidad pública”, ante la diferencia entre lo dicho y lo hecho, hicieron “mutis por el foro”. Y los habitantes sensibles de Misiones, de pronto se volvieron indiferentes.
El capítulo que pretendía derogar la emergencia en discapacidad y el financiamiento a las universidades fue rechazado por 123 votos contra 117. Pero en esos 117 estuvieron los siete misioneros: los renovadores Ahuad, Ruiz, Arrúa y Vancsik, los libertarios Diego Hartfield y Maura Gruber y el diputado del PRO Emmanuel Bianchetti.
La alianza política entre Javier Milei y Carlos Rovira no es ninguna novedad para los que se informan con periodistas. Pero debe ser toda una sorpresa para los que se entretienen con los publicistas del gobierno renovador.
En Misiones hay una sociedad de hecho en la que conviven funcionarios públicos, militantes políticos, periodistas, líderes religiosos, gremialistas, dirigentes que la van de opositores, empresarios y habitantes del llano. La estrategia comunicacional de este sector es mentir o ser un cómplice silencioso de las mentiras del poder. Eso nos recuerda algo que dijo Frank Sinatra: “Los periodistas de Hollywood mienten todo el día. Y a la noche, cuando se acuestan a dormir, siguen mintiendo”.
En Misiones el poder y sus cómplices, o por lo que dicen o por lo que callan, hacen lo que decía Sinatra: mienten todo el día. Y a la noche, cuando se acuestan a dormir, siguen mintiendo.
LA COMPLICIDAD DEL SILENCIO
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