Argentina duplicó el nivel de crédito al sector privado

El crédito bancario al sector privado en Argentina se duplicó en lo que va del gobierno de Javier Milei. Pasó de representar el 5,2% del Producto Bruto Interno (PBI) a fines de 2023 al 12% en noviembre de 2025.

Pero el país sigue muy lejos de los estándares de América Latina, donde los niveles de financiamiento superan por mucho los alcanzados localmente. De acuerdo con el análisis de la consultora 1816, tras un período de estancamiento motivado por la incertidumbre política y la volatilidad de las tasas en moneda local, el financiamiento a privados retomó una senda de crecimiento.

El informe destaca que “el potencial de largo plazo para el crédito es gigante” y considera que el repunte se produjo en un contexto de recuperación de la actividad económica y desaceleración de la inflación, aunque el stock de liquidez en la economía sigue siendo bajo. El contraste con la región A pesar del crecimiento reciente, el nivel de crédito al sector privado en Argentina se mantiene muy por debajo de los máximos históricos nacionales y de los países más desarrollados de la región. En la década de 1990, el crédito local llegó a representar el 24% del PBI, cifra que duplica el nivel actual.

La brecha se amplía al comparar con otros países latinoamericanos: “Chile y Brasil, los dos sudamericanos más desarrollados en ese aspecto, tienen préstamos bancarios por 103% y 76% del PBI”, señala el análisis. Otros países de la región, como Uruguay, México, Colombia, Ecuador y Paraguay, también superan a Argentina en la relación entre crédito y PBI. El informe atribuye el crecimiento reciente del crédito a la remonetización de la economía, aunque advierte que la liquidez disponible sigue siendo insuficiente para sostener una expansión sostenida. “Una condición necesaria para que pueda materializarse un crecimiento sostenido del crédito es que se vaya remonetizando la economía, que tiene un stock muy bajo de liquidez”, subraya el documento. Si bien los agregados monetarios repuntaron desde fines de 2023, aún no alcanzan los niveles previos a la administración anterior ni los requeridos para equiparar la demanda de crédito de los países vecinos. Lo que está claro, es que el Gobierno nacional está haciendo todo lo que está a su alcance para reducir las tasas de interés, con el fin de reactivar el crédito y estimular la economía. En materia de política monetaria, Nación mantuvo fija la Base Monetaria Amplia entre mediados de 2024 y abril de 2025. Tras la unificación cambiaria, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) transfirió $12 billones de utilidades al Tesoro, lo que permitió ampliar la base monetaria. Sin embargo, en los últimos meses, la Base Amplia se redujo por la compra de pesos por parte de Estados Unidos, la venta de dólares del BCRA y las ganancias del Central en el mercado de futuros, lo que limitó la liquidez disponible. El informe también menciona que, aunque existen alternativas para expandir el crédito —como reducir los requerimientos de efectivo mínimo para los bancos—, la suba reciente de los encajes fue absorbida en títulos que deberían ser repagados con fondos del Tesoro, y los encajes en efectivo no superan significativamente la media histórica.