Tras las críticas y advertencias del gobernador Hugo Passalacqua sobre el nuevo decreto del presidente Javier Milei sobre el sector yerbatero, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, señaló que «a partir de ahora el INYM deberá focalizarse en la calidad y la promoción, no en ser un interventor de precios y de restricción a la producción, asimilándolo al modelo del INV (Instituto Nacional de Vitivinicultura) que logró posicionar exitosamente a la industria argentina del vino a nivel global».
Y agregó que «la desregulación del sector, propiciada por el DNU 70/23, ha dado sus frutos. La producción total creció 29% en 2024 alcanzando un récord histórico; las exportaciones crecieron casi 17% alcanzando otro récord histórico. A su vez, el precio local para millones de familias argentinas cayó sustancialmente (un 44% en términos reales).
Una industria que ofrece mejores precios a los argentinos y que se expande conquistando el mundo es el sentido buscado de un entorno de mayor libertad. La industria ha abrazado el desafío y tiene un futuro extraordinario de desarrollo global. Más claro, echale agua (caliente, al mate). Menos intervención es más competencia, es más producción, es más exportaciones y son precios más bajos para todos los argentinos», finalizó el ministro.
