OBERÁ. Así lo advirtió el dirigente yerbatero de APAM, Cristian Klingbeil quien viene observando un creciente robo de yerba en los últimos tiempos pero ahora para contrabandearlos al vecino país.
«Roban tanto hoja verde como mudas, y las mudas están llevando a Brasil. Tengo confirmación que mudas de viveros de la zona de Panambí, la mayoría están vendiendo para Brasil, pasan por distintos pasos, se está yendo todo para allá y parece que hay alguien que acopia, compra lo robado, carga la camioneta, va al río y pasan al otro lado porque están pagando en efectivo y bastante mejor de lo que paga cualquier vivero acá, así que es un gran negocio y se están yendo nuestra inversión», contó.
Respecto a la materia prima, señaló «y hoja verde lo mismo de siempre, secaderos que compran (lo robado), necesidad de yerba por todos lados, falta yerba y compran lo que haya».
Durante enero y febrero, las asociaciones yerbateras hicieron el planteo al gobierno provincial y a los diputados por el constante y creciente aumento de robos de yerba. En la ocasión reclamaron celeridad por parte de la justicia ya que los delincuentes salían tan rápido como eran capturados debido a la falta de condenas por reincidencias ya que el robo sin violencia es considerado hurto, por lo tanto delito menor excarcelable.
Posteriormente, durante la cuarentena mermaron los casos: «El frenate del robo fue por la mayor circulación de gente en las chacras, por el tema de empezar la cosecha, algunos empezaron a machetear antes de la tarefa, hubo un mayor movimiento en las chacras y eso paró un poco el choreo. Aparte la gente que se metía después pudo conseguir trabajo tarefeando de manera legal sin riesgo de caer preso, entonces escaseaba gente para hacer esa matufia», analizó en referencia a los delincuentes.
